Realismo atroz

Mirada perdida.
Periodo de catarsis.
Dormirse con la la ansiedad,
en la piel.

Pequeños rostros marcados
en la conciencia,
penetran pensamientos.

Fragiles deseos, se vuelven
Ciertos pasadisos.
Formas equivocadas persisten
en este regocigo de olvido.

Formas inalterables reposan aca
No las ves?
Se dibujan con tus manos.
Te incendias tan rapido,
el dolor se incrusta.

Cancion imborrable.
Inconciencia diurna.
Palabras olvidables.

El silencio llego a tiempo...
Alguien escucho las oraciones
Que esconden tesoros..

Es el ultimo día,
Ya no quiero vanidad.
Habitan las frases gastadas.

Sobran sueños..
Nadie quiere esperar..

Ámbar

Transitar por el laberinto
que habita en mi mente,
es un doble riesgo.

Podrías ayudarme
a encontrar la salida,
y hacer mas amenos mis días.
Mi ser indomable noto tu presencia,
escucho tus suspiros como ecos.

Busco esa frase que siempre soñe,
talvez la encuentre en vos.
Llevame a la plenitud dulce luciérnaga.

Mi alter ego me lleva a otros sitios.
Expandirse de esta bruma, que se aloja en mi alma…

Eres mi ámbar voy hacia ti…
Conocerte es mi sendero,
Explorarte mi perdición.

.

Ayer...

Ayer había susurros en mis oídos,
Tu flor se abría,
Tus pétalos volaban con el aire fresco,
que se renovaba.

Tentados por la magia,
corríamos tras esa imagen.
La armonía culminaba,
en tu bella sonrisa, que se reflejaba.

Contemple el elixir de los días,
en tu companía.
Esta hermosa locura,
dejo huellas profundas.

Como deseo verte a veces,
quizás solo se, que eras fugaz…

Mis ojos

Mis ojos cobran vida al abrirse,
Son testigos de esta humanidad.
A veces solo quieren cerrarse,
para no ver injusticia,
para solo olvidar.

Antes parecían no ver,
en mi ceguera habitual.
Pero ahora el sol los obliga,
a formar parte del cosmos.
A filmar su propia aventura,
que solo quedara grabada en mí.


Mis ojos se reflejan,
vuelven a revivir.
Queriendo llegar a la eternidad.
No se quieren perder los tuyos…

.

.

Capsula

En este paisaje siniestro,
Te estas volviendo tan habitual en mí.
Busco desposarme del ayer,
En esta oscuridad, nuestros silencios persisten.

Invento una maquina de la felicidad,
pero solo logra alejarnos,
deseando lo inalcanzable.
Llevándonos allí al borde del camino.

Tus aguas se vuelven turbias (tu rostro cambia),
tu lenguaje es inentendible (ya se convirtió).
Los nubarrones ya se divisan (en esta lluvia),
en esta monotonía que se vuelve obsesión.

Déjame descifrar tu coartada,
antes de que esto se evapore,
porque en mi espejo aún estas.

Te veo así entero,
con ganas de volver a empezar.
Olvidemos el dolor, haciéndolo carne.
Quédate conmigo…